Toallas de papel y secadores de aire: una contienda por la higiene
A la hora de hablar de los dispensadores de aire y las toallas de mano, entramos en un paradigma interminable, pues hay variantes que impulsan a la preferencia por alguno de los sistemas y es decisión del usuario el camino a tomar.
Una de estas variantes, es la bien conocida controversia sobre la salud propia o la de nuestro entorno al usar toallas de mano o secadores de aire. Referente a esta polémica, entramos estudios que demuestran que los secadores de aire son “Eco-friendly” o amigables con el medio ambiente; en contraste a este descubrimos otros estudios en donde demuestran que las toallas de papel son causantes de la deforestación colectiva. Lo que aún no sabe el público, es que, si bien es necesario talar cierta cantidad de árboles durante el proceso de fabricación de las toallas, también se hace todo un ejercicio de reforestación en el espacio de la silvicultura destinada a repoblar estas zonas.
Contamos con que estos no son factores potenciales que lleven al usuario a distinguir uno del otro, pero existe un componente que marca la oposición en este enfrentamiento. La multitud de bacterias halladas posterior al uso de estos.
Estudios de diferentes universidades decidieron poner a pruebas ambos oponentes con el fin de investigar la higiene de estos. Para empezar, científicos encontraron que un elemento importante en el correcto aseo y desinfección reside en el adecuado lavado de manos. Fundamentalmente piden a los usuarios tomar conciencia de cómo se lavan las manos luego de entrar a un baño público, es decir, no se trata de enjuagar las manos con agua y una gota de jabón, sino de restregar bien y dejar que el agua corra al menos medio minuto.
Los resultados de estos análisis revelaron que un factor importante para una higiene integra es el secado de manos idóneo, con el fin de disminuir el registro de agentes microbianos que habitan en las manos. El residuo de agua en las manos genera mayor probabilidad de transmitir microorganismos en comparación con los que se han secado por completo. El público en general y algunos profesionales de la salud no siempre siguen los consejos, los procedimientos de lavado pueden ser pobres y las tasas de cumplimiento bajas.
Se ha estimado que la contaminación cruzada contribuye al 40% de los casos de infecciones asociadas a la atención médica y el cumplimiento de la higiene de manos representa un paso esencial para minimizar tales infecciones, es por esto que se comprende esta práctica como obligatoria en el proceso de higiene según estudios realizados por SFAM (Society for applied Microbiology)
Se demostró que los virus pueden sobrevivir en las manos durante periodos diversos, ya sea por minutos, horas y hasta meses. Por lo tanto, la dispersión de virus en el baño tiene el potencial de contaminar a personas y superficies, incluidas las de los secadores de mano. La elección del dispositivo de secado debe considerarse relevante en áreas donde la prevención de infecciones es primordial, como los entornos que involucran directamente a la industria alimentaria.
Adicional a ciertas afirmaciones que hemos visto a lo largo de esta intervención, encontramos que los secadores de aire con mayor potencia, pueden llegar a esparcir bacterias provenientes de los inodoros, especialmente aquellos que no tienen tapa. ¿Cómo sucede esto? Cuando una persona vacía el inodoro, se esparcen partículas bacterianas a una altura de hasta 4,5 metros en el aire en todo el lugar. Los secadores de aire empujan dichas bacterias en todo el entorno a través de los chorros de aire.
Dados los resultados, se declaró que hay poca justificación para el uso de secadores de aire en baños, dados los riesgos. Por otro lado, el estudio señaló que “las toallas de papel absorben agua y microbios que permanecen en las manos y, si se eliminan correctamente, tienen menos potencial de contaminación”.
Como resultado final se recomiendan las toallas de papel como medida preventiva. No obstante, y como lo mencionamos anteriormente, detectamos que la reputación de las toallas se basa más en materia de contaminación ambiental que en su desempeño. Por eso es necesario desmentir estos hechos, considerando que el portafolio en toallas introduce sistemas completamente reciclables, hecho a base de cartón y papel que se obtiene a través de grandes compañías que recurren a esta clase de material para sus empaques y envolturas.
En época de virus, las indicaciones sobre el lavado de manos difundidas por los entes de salud como la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Ministerio de Salud y UNICEF, recomiendan el uso de toallas desechables para un secado completo, así mismo usar la toalla para cerrar el grifo. No se recomienda el uso de toallas de tela de uso múltiple del tipo colgante o en rollo en entornos de atención sanitaria.
Por lo tanto, el uso de toallas desechables para secarse las manos puede considerarse una práctica más higiénica, segura, cómoda y sostenible, especialmente cuando se trata de lugares con una gran circulación de personas, como el sector médico y el industrial. Cuando se trata de salud, debe prestar especial atención para salvaguardar a sus clientes y empleados.
Recuerda, la importancia de la higiene de manos para minimizar el riesgo de transmisión de microorganismos patógenos y piensa en tu salud y en la de tus colaboradores en la elección del dispositivo de secado que situaras en tu establecimiento.
Es por esto que Elite Professional te presenta un portafolio flexible de toallas de mano para todo tipo de área, contando con sistemas de dispensación que permiten tu eficiencia y desempeño.
Fuente: SFAM: Evaluation of the potential for virus dispersal during hand drying: a comparison of three methods – ASM: Deposition of Bacteria and Bacterial Spores by Bathroom Hot-Air Hand Dryers – Mayo Clinic: The Hygienic Efficacy of Different Hand-Drying Methods: A Review of the Evidence.